martes, 22 de julio de 2008

domingo, 20 de julio de 2008

viernes, 11 de julio de 2008

Ser mejor...



Día a día nos enteramos de hechos que nos horrorizan, nos entristesen, nos dejan sin palabras.
Afortunadamente, algunos días, llega a nosotros alguna noticia esperanzadora, aquella que nos hace volver a creer en un futuro mejor.
Entre tanto de lo primero y poco de lo segundo he aprendido a valorar hasta el más pequeño gesto de amor por el prójimo, es que hay tantos "individuos" que van por la vida sin importarle en absoluto el que está al lado, que hay que valorar al que (aunque sea por un rato) se siente parte de este mundo y hace algo (mucho, poco, casi nada... pero ALGO) para que esta sociedad sea mejor.
Nadie es perfecto, aprendemos a cada instante, hoy no somos quienes fuimos ayer, la experiencia nos transforma, siempre tenemos la posibilidad de seguir creciendo, de dejar de hacer ciertas cosas e incorporar nuevos hábitos.
Nuestra imperfección nos descalifica como jueces. Pero es tan fácil juzgar!
Seguramente es más difícil asumir el compromiso de cambiar, y los cambios más significativos empiezan por uno mismo, y es a través de ese proceso personal que afectamos también nuestro entorno, por lo cual todo hecho positivo repercute en el medio en el que vivimos, del que somos actores.
Y si alguna vez (aunque sea por un rato) nos sentimos parte de este mundo y hacemos algo (mucho, poco, casi nada, pero ALGO) bueno, no podremos decir que somos mejor persona que los demás, pero sí, que somos mejor persona de lo que fuimos antes y si además podemos reflejarnos en una mirada que nos aliente en vez de señalar lo que aún hacemos mal, es muy probable que podamos asumir un compromiso aún mayor y sigamos haciendo algo (mucho o poco... pero ya no casi nada).

sábado, 5 de julio de 2008


En un día de nubes y niebla, el sol puede colarse... a través de un recuerdo, de una mirada, de un abrazo a tiempo.

miércoles, 2 de julio de 2008

Kundera

“La verdadera bondad del hombre sólo puede manifestarse con absoluta
limpieza y libertad en relación con quien no representa fuerza alguna. La
verdadera prueba de la moralidad de la humanidad, la más honda (situada a
tal profundidad que escapa a nuestra percepción), radica en su relación con
aquellos que están a su merced: los animales.”
Milan Kundera.

mis caneamores